Anillos de matrimonio |
En la sociedad se encuentra demarcada por ideas y parámetros arbitrarios que muchas veces resultan incoherentes con el deseo real de las personas. ¿Quién dijo que tenemos que contraer matrimonio y vivir en pareja?
Cada vez son más las personas que eligen vivir en soledad sin la compañía de nadie. ¿Esta mal?. No, claro que no. Las parejas o las asociaciones con otras personas suponen inevitables problemas, pautas de convivencia, derechos divididos, espacios y privacidad compartida, entre otras cosas.
Algunos individuos son felices cuando sienten la libertad plena de hacer y deshacer todo lo que los rodea. Sin rendir cuentas y sin asumir compromisos con personas que pueden llegar a modificar sus vicios y costumbres.
Paralela a esta creencia, también están las personas que no pueden vivir sin compartir su espacio, pedir consejos y sociabilizar al máximo con sus pares; claro que vivir en pareja también puede significar construir un futuro con alguien que más tarde puede formar parte de la familia. Todo parece muy sencillo y sacado de un cuento de hadas, pero evidentemente la realidad es otra.
Debido a los matrimonios concebidos desde la ley civil, muchas parejas viven cómodas y felices, pero la gran mayoría termina peleándose fuertemente con su cónyuge hasta el día en que se decide disolver la unión, ¿Todo fue una gran perdida de tiempo?. Quizás. Lo cierto es que probar no siempre es pecado, y la gente es valiente, en algunos casos los lazos funcionan. Por otro lado diversas parejas de ancianos, devotos y religiosos, "festejan" el cumplimiento de más de 40 años de vida matrimonial ¿Qué contraste no?.
¿Qué esta bien y que está mal? Simplemente hay que realizar lo que nos haga felices. No siempre la pareja será la salvación, como tampoco lo será la soledad, pero cada cual tiene sus gustos.
0 comentarios:
Publicar un comentario